La montaña tiene una energía sanadora maravillosa, mientras más alto subes más energía, más belleza, más magia.
Tengo el privilegio de haber vivido casi toda mi vida en la montaña y de conocer muy bien su energía sanadora.
Muchas veces me sentía deprimida, triste o con poca energía y me iba a la montaña sola, a las cascadas, esteros, a bañarme, a meditar, contemplar, escuchar a sentir. Siempre regresaba con energía, más clara, contenta y renovada.
Hace más de 25 años comencé a realizar caminatas por el día con grupos mixtos para mostrar y compartir la maravilla de nuestra cordillera y su energía sanadora.
Muchas/os de los participantes en un principio tenían susto a la altura y a sus propias limitaciones, al vencer estas limitaciones sus vidas fueron cambiando para mejor en todos los aspectos. Posteriormente junto a mi hermana Luz Clara decidimos comenzar estos encuentros de mujeres. Luz Clara tenía mucha experiencia con grupos de mujeres y yo tenía la experiencia de la montaña. Juntas nos potenciamos e iniciamos estos encuentro de fin de semana para sanar, limpiar, purificar, renovar las energías y principalmente contactarnos con nuestra mujer sagrada, intuitiva y guerrera, a través de rituales y del contacto con nuestra madre tierra, la pachamama.
Los encuentros se realizan el fin de semana más cercano a la luna llena durante todo el año. Hay otras actividades por el día que se realizan para las lunas nuevas y el encuentro Pachamama 2 para las noches sin luna y así dormir bajo un maravilloso cielo estrellado, ya que este encuentro es acampando en la alta cordillera.